En un escandaloso hallazgo, el Gobierno denunció la existencia de comedores fantasma que recibían subsidios millonarios destinados a brindar alimentación a los más necesitados. Según una investigación, se destapo una red de corrupción que utilizaba la necesidad de los vulnerables como fachada para desviar fondos hacia organizaciones políticas y movimientos sociales.

El Ministerio de Capital Humano confirmó la existencia de merenderos que no operaban desde hace años, e incluso algunos que estaban ubicados dentro de barrios privados. Más del 50% de los centros comunitarios relevados aparecían en registros oficiales, pero en realidad eran baldíos o residencias particulares. Además, se descubrió que la distribución de alimentos estaba siendo gestionada por entidades políticas y sociales, incluyendo el involucramiento de una exfuncionaria de La Cámpora.

Tras la publicación de estos hallazgos, la Subsecretaría Legal del Ministerio de Capital Humano presentó una denuncia en la Justicia debido a la presunción de incumplimiento de deberes de funcionario público. Desde el ministerio, se destacó que estas acciones están en línea con la política anticorrupción y de transparencia establecida por el gobierno nacional desde diciembre de 2023.