En la provincia de Misiones, la tensión social alcanzó un punto crítico debido a las protestas salariales encabezadas por la policía local, con el apoyo de médicos y docentes. Ante esta situación, el ministro de Gobierno de Misiones, Marcelo Pérez, anunció que los oficiales que participen en las huelgas serán desvinculados de sus puestos.
En declaraciones, Pérez calificó la sublevación de inadmisible y fuera de la ley, subrayando que los agentes no pueden utilizar bienes del Estado para protestar. “Hay una denuncia penal en curso que determinará las responsabilidades, y ya se han reportado 28 móviles policiales robados y usados indebidamente”, explicó el ministro.
El gobierno provincial, por su parte, defendió sus acciones afirmando que en los últimos cuatro meses se otorgaron tres aumentos salariales para la administración pública, con el último aumento triplicando el índice de inflación. “Seguiremos implementando aumentos para recomponer el bolsillo del empleado público, pero deben ser sostenibles para no impactar negativamente en los contribuyentes”, señaló Pérez.