Que el Niño Jesús, María y José protejan a todas las familias del mundo, recordándonos el verdadero significado del amor y la unidad familiar.
El Papa Francisco nos invita a reflexionar sobre la Sagrada Familia, quienes enfrentaron peligros y el exilio, demostrando que con fe y amor es posible superar cualquier adversidad. Son un modelo perfecto de diálogo, entrega y confianza en Dios.
La Familia: Signo del Diálogo Divino
La Iglesia destaca que la vida familiar no debe reducirse a los problemas cotidianos, sino enfocarse en los valores trascendentales. La familia es un puente entre Dios y el hombre, un espacio donde padres e hijos deben estar abiertos a la Palabra, al diálogo y a la oración.
El Papa Juan Pablo II, en su enseñanza, subrayaba la importancia de rezar juntos, afirmando:
“La familia que reza unida, permanece unida”.
En esta Navidad, hagamos de nuestras familias un ejemplo de amor, oración y comunión. Que el Santo Rosario y la escucha mutua nos acerquen cada vez más a Dios.