La compañía brasileña Natura, propietaria de Avon, clausuró su planta de distribución en San Fernando, provincia de Buenos Aires, despidiendo a 278 trabajadores como parte de un plan de reestructuración en Argentina. El proceso comenzó con retiros voluntarios y finalizó con notificaciones de despido por mensajes y llamadas telefónicas, según testimonios de empleados afectados, algunos con más de 30 años de antigüedad.
Avon, que llegó a Argentina en los años 70, había establecido su primera planta en Moreno, seguida por el centro de distribución en San Fernando y otra en Garín. A partir de ahora, la distribución de los productos se concentrará en la planta de Garín.
Este cierre forma parte de un enfoque global hacia la digitalización. Desde la pandemia, Avon incrementó un 132% las ventas online y ahora apuesta a canales digitales en Argentina, como ventas por WhatsApp. Natura sigue expandiendo su estrategia internacional, a pesar del impacto laboral local.