En un emotivo gesto de empatía y unión, alrededor de 100 personas en situación de calle o sin compañía disfrutaron de una cena de fin de año en el Parque San Martín, en el pasaje Beltrán y San Martín de la ciudad de Salta. La iniciativa fue organizada por la Comisión Permanente de la Cena Solidaria de Fin de Año, un grupo de voluntarios comprometidos con brindar apoyo y calidez en una fecha tan especial.
El menú, compuesto por pollo al horno con guarnición, postre y bebidas sin alcohol, fue servido en carpas prestadas por el Ejército. Vanesa Pantoja, una de las organizadoras, recordó que esta tradición comenzó hace siete años durante una mateada con amigos y desde entonces se ha convertido en un ritual solidario cada 31 de diciembre.
“En este tiempo donde se ve tanto odio, nuestra bandera es la solidaridad y la empatía para cerrar la grieta y la crítica”, expresó Vanesa. También destacó la importancia de ofrecer no solo comida, sino un abrazo y un espacio festivo a quienes más lo necesitan.
Esta conmovedora acción fue posible gracias a un equipo de voluntarios, entre ellos Mabel Sánchez, Florencia Bejarano, Daniel López, Nancy Museda, Claudio Junco y Pedro Benisio, quienes recolectaron insumos, prepararon la comida y sirvieron las mesas. Además, muchos ciudadanos se acercaron con comida para compartir y escuchar las historias de los asistentes, sumándose a este gesto de amor y humanidad.
Una vez más, Salta demostró que la solidaridad puede transformar noches solitarias en momentos llenos de esperanza y alegría.