En una noche que prometía melodías y alegría, el líder de “La Roger Band“, Darío Fernández, vivió su último acto musical en medio de una tragedia. Mientras actuaba en el Salón Vial, Fernández comenzó a sentirse mal, marcando el inicio de un desenlace inesperado.
Darío Fernández, reconocido por su pasión tanto en el escenario como en el campo de juego, no pudo resistir el embate de la enfermedad que se apoderó de él durante su actuación. A pesar de los esfuerzos del personal médico y de seguridad, su descompensación marcó el inicio de una cadena de eventos fatales. Tras ser trasladado de urgencia al hospital Central Ramón Carrillo, sus signos vitales se desvanecieron, dejando un vacío en el mundo de la música local.
Más allá de sus logros como músico, Fernández también era una figura destacada en el ámbito deportivo, con un legado en el Club El Chorrillo que se suma a su carrera artística. Su hijo, Ignacio, continúa el legado familiar en el deporte como jugador de la Sub 23.
El estreno reciente del clip “Este oficio de cantante” en febrero pasado mostraba la felicidad y dedicación de Fernández y su grupo, conformado en su mayoría por familiares. Esta pasión por la música fue una nueva senda en la vida de Fernández, que dejó atrás el fútbol por una carrera musical a instancias de su tío hace siete años.
Juana Koslay, la localidad que vio crecer tanto a Fernández como a su legado musical, se ve ahora envuelta en dolor por la pérdida de uno de sus talentos más queridos. “La Roger band”, nombrada en honor a la calle Roger Ballet donde residían todos sus integrantes, queda marcada por la ausencia de su líder y fundador.
El fallecimiento de Darío Fernández deja un hueco irremplazable en la música local, recordándonos que, detrás de cada melodía, hay historias de pasión, sacrificio y un legado que perdura en el corazón de quienes lo conocieron y admiraron.
El último video de “La Roger band” donde canta Darío: