El exadministrador del Mercado San Miguel, José “Pepe” Muratore, recibió un fallo en su contra por parte del Juzgado de Procesos Ejecutivos N° 1, a cargo del juez Ricardo José Diez. La sentencia declaró abstracto el amparo presentado por Muratore y respaldó la intervención municipal, ordenando que abandone su cargo o, de lo contrario, será desalojado de manera forzosa.
El fallo protege a los puesteros del mercado y garantiza su derecho de posesión sobre los locales, cerrando un prolongado conflicto administrativo entre Muratore y la Municipalidad de Salta, que había designado como nuevo administrador a Emilio Gutiérrez.
El conflicto por la intervención
La resolución fue el resultado de un amparo impulsado por tres asociaciones de puesteros, incluyendo una liderada por Muratore, que buscaban revertir la intervención. Sin embargo, el juez respaldó la medida del municipio y dio luz verde al cambio administrativo.
El pasado lunes, la transición estuvo marcada por disturbios protagonizados por algunos puesteros en rechazo a la intervención. Desde la Municipalidad, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Chalabe, justificó la decisión como necesaria para garantizar “un mercado seguro y ordenado”. Chalabe aseguró que la competencia municipal para estas acciones es legítima y prometió que los comerciantes conservarán sus puestos.
Denuncias y medidas de seguridad
Muratore enfrenta denuncias por amenazas presentadas por la Procuración Municipal. Chalabe instó al exadministrador a acatar la medida en beneficio de los trabajadores y condenó los actos de violencia registrados durante los últimos días.
Además, la Municipalidad anunció un proceso de reempadronamiento de puesteros para reforzar el orden en el mercado y evitar futuros conflictos.
Un plan para la recuperación del mercado
Tras las fiestas, el municipio implementará un proyecto integral para recuperar y modernizar el Mercado San Miguel, afectado por un incendio en el pasado. El plan contempla mejoras en las instalaciones y mejores condiciones para comerciantes y clientes.
“Nuestro objetivo es garantizar un mercado seguro, ordenado y renovado”, concluyó Chalabe, destacando que el diálogo con los feriantes será clave en esta etapa de reconstrucción. Mientras tanto, los puesteros esperan que el proceso de transición avance sin nuevos enfrentamientos, confiando en que las medidas adoptadas aseguren un futuro más próspero para el histórico mercado.