La tarde en San Luis se vio marcada por un incidente inusual cuando la Policía recibió una alerta sobre un niño solitario cerca de la Ruta 7, específicamente en el barrio 500 Viviendas Sur de la capital puntana. Un oficial, en su patrullaje rutinario, descubrió al niño de tan solo 3 años caminando sin compañía cerca de las 17.40 horas.
La Comisaría de Atención a la Niñez, Adolescencia y Familia (Canaf) intervino de inmediato para resguardar al menor, mientras que en paralelo, en la Comisaría N° 41, una angustiada mujer identificada como Garro, de 26 años, reportaba la desaparición de su hijo de 3 años. Relató que el niño había estado jugando en la puerta de su casa junto a un sobrino, pero al salir a buscarlo, había desaparecido misteriosamente.
La búsqueda concluyó a tan solo 300 metros de la vivienda del niño, en un área despejada. La rápida intervención policial evitó que la situación pasara a mayores, y la justicia actuó de forma inmediata. Tras unas horas de incertidumbre, el niño fue entregado nuevamente a sus aliviados padres.
Este episodio sirve como recordatorio de la importancia de la vigilancia constante y la pronta acción ante situaciones de riesgo, garantizando así la seguridad de los más vulnerables en la sociedad.