El partido entre el Inter Miami y Monterrey tomó un giro inesperado antes incluso de comenzar, cuando el guardaespaldas de Lionel Messi fue expulsado del campo de juego, desatando una ola de controversia en las redes sociales. Conocido como “Cheuko”, este hombre, encargado de la seguridad del astro argentino, se vio envuelto en un altercado debido al protocolo de seguridad en el estadio de Monterrey.

El video del incidente se hizo viral rápidamente, mostrando cómo Cheuko era escoltado fuera del campo de juego minutos antes del inicio del partido. Aparentemente, la Concacaf no había autorizado su presencia en el terreno de juego, limitándolo a permanecer en los vestuarios o en la tribuna. Esta decisión sorprendió a muchos, especialmente considerando que Cheuko había pasado por las revisiones de seguridad habituales el día anterior para garantizar la protección de Messi.

Durante cada partido, Cheuko se encuentra en uno de los costados del campo, listo para intervenir en caso de alguna emergencia que ponga en riesgo la seguridad de Messi. Sin embargo, las restricciones impuestas en el estadio de Monterrey le impidieron cumplir con su deber habitual.

La situación generó debate sobre la importancia de la seguridad de los jugadores de élite y sobre la rigidez de los protocolos en los eventos deportivos. La expulsión de Cheuko planteó interrogantes sobre si las medidas de seguridad están obstaculizando la capacidad de los equipos para proteger a sus estrellas y si se necesitan ajustes en los protocolos existentes.